LAURA TERÁN FOTÓGRAFA E INTEGRANTE DEL FORO AMBIENTALISTA SANTIAGO RELATA EL DRAMA DE KENIA

AFRICA VIOLENTA - POBREZA Y RENCORES Años de tristeza reflejados en los ojos de esta mujer Keniana.

Por Álvaro Leiva
Fotos: Gentileza de Laura Terán

La fotógrafa Laura Terán, que se define como una enamorada de África se topó con un escenario inesperado durante su reciente viaje a Kenia. Tristeza de saber que la violencia se infiltró también en Kenia, uno de los países más estables de la región. Laura realizó trabajos de carácter benéfico y humanitario durante visitas anteriores a la región africana.
Desde su Tucumán natal, pero con fuertes raíces familiares y afectivas en Santiago del Estero, Laura integra y colabora en el Foro Ambientalista Santiago.
El violento conflicto que estalló en Kenia luego de las elecciones presidenciales del 27 de diciembre, que capturó la atención del mundo, golpeó de lleno a Laura , que visitaba el país africano con el objetivo principal: distribuir parte del dinero que había recaudado en su última muestra, titulada “África desaparece”.
“La situación fue complicada y muy triste a la vez”.“Andar por África siempre implica un poco de riesgo, pero Kenia se distinguía en la región por ser un país muy tranquilo y pujante. Pareciera que los conflictos yacían subterráneos, como tapados, aunque los problemas étnicos y tribales siempre están muy a flor de piel, pero también se encuentran como detonantes de la violencia los rencores que sienten entre ellos. Y la extrema pobreza, que hace que los jóven es, en particular, sientan que no tienen nada que perder”.
Laura estuvo desde el 28 de diciembre al 13 de enero conociendo Egipto y Jordania, y cuando se desataron los conflictos en Kenia, por el presunto fraude electoral a través del cual fue reelecto el presidente Mwai Kibaki, pensó en abandonar la idea de viajar hacia ese país. “En principio no iba a ir, pero hablé por teléfono y me dijeron que la situación estaba más tranquila”
“El presidente Kibaki es kikuyu, de una tribu que habitaba el centro de Kenia, donde están las mejores tierras. Es la gente que más progresó económicamente y en cuanto a educación también, y es como que las otras tribus celan esta situación”, dice Laura . “Pero los kikuyus no se mantuvieron en un solo sitio, sino que se expandieron por todo el país. Ahora hay 500.000 kikuyus a los que los Luo (tribu a la que pertenece el candidato presidencial opositor Raila Odinga) les insisten violentamente que vuelvan a sus tierras ancestrales, lo que es terrible, porque se trata de gente que lleva décadas viviendo en esos lugares”.

La máxima situación de riesgo la vivió cuando tuvo que pasar por la parte central de Kenia y se desató la violencia en Nakuru y en Naivasha. “Dejába Nakuru y cuando salí del pueblo empecé a ver gente que corría y corría, y a los 100 metros algunas personas agarraban piedras. Continué el viaje y cuando llegue al otro destino, que era un lago, me contaron que la situación en Nakuro había sido terrible. Al día siguiente volví por ahí y ví mucha gente con palos y machetes; camiones del ejército; negocios cerrados y algunos quemados. Pasé a las 12.30 y a las dos horas hubo un enfrentamiento en el que mataron a 47 personas”.

Laura contó que cada tres o cuatro días se contactaban con sus familiares para darles tranquilidad.“Me comunicaba a través de mensajes de texto cuando teníamos señal ”, afirmó.
“Por más que hubo un avance de la civilización occidental sobre las costumbres de estos pueblos, que está haciendo, entre otras cosas, que cada vez menos se vistan con sus ropas tradicionales, su sentido de pertenencia tribal parece intacto por sobre el sentimiento de nación, porque no logran verse como una”. Los partidos políticos de Kenia han moderado sus posturas en las negociaciones sobre la disputada reelección del presidente Kibaki, y parecen estar a punto de alcanzar un acuerdo para compartir el poder, lo que pondría fin a la sangrienta crisis.

Los disturbios y los ataques étnicos, que causaron la muerte a más de 1.000 personas, se originaron en la acusación del líder de la oposición, Odinga, que afirmó que Kibaki había manipulado las elecciones de diciembre. El ex jefe de la ONU, Kofi Annan, dijo que

en los últimos días hubo progresos significativos en las negociaciones para terminar el conflicto.
Laura recaudó fondos de su muestra fotográfica “África desaparece” y los distribuyó entre una escuela de niños y las madres de sus alumnos. Vivió la situación más placentera del viaje fotografiando animales salvajes y en la Misión de Lenkisem, una institución católica en la que ya realizó trabajos de carácter benéfico y humanitario durante visitas anteriores a la regiónafricana.

“La Misión está asentada en territorio de la tribu de los Maasai, donde reinan la paz y la tranquilidad”. Esta institución fue la destinataria de parte del dinero que Laura recaudó en su muestra del año pasado, titulada “África desaparece”.Distribuyó los fondos entre el Boarding School, una escuela de tiempo completo para niños, y a las madres de estos alumnos. “Son cinco grupos de mujeres Maasai que elaboran artesanías para vender a los turistas que visitan sus tierras. La ayuda les servirá para adquirir materia prima”.

África es un continente que cautiva a cualquiera, y mucho más a Laura, que visita con cierta frecuencia la región, ya sea para volver a ver a sus amigos o para realizar una misión social en la que está comprometida a partir de su dilatada experiencia como fotógrafa.

Laura revivió esos días agitados, el drama de miles de familias desplazadas por las luchas entre tribus, sin olvidar las cosas buenas que recoge siempre de cada viaje por esa región.
El resto del dinero, fue destinado a un proyecto de la Fundación para la Conservación de la Naturaleza de Tucumán, que empleó dichos fondos para la instalación de hornos ecológicos en hogares de la zona de El Corte."La tarea del fotógrafo es muy importante en África. Por medio de una cámara deja testimonio de las culturas y también puede alertar sobre las especies en vías de extinción. En este sentido, el fotógrafo cumple una función social muy relevante. El mundo conoce África, en gran medida gracias a la fotografía", señaló Laura.